domingo, 27 de septiembre de 2009

Después del agujero

En capítulos anteriores...

"La primera ventaja es que cuando el cuento llega al final no se acaba,
sino que se cae por un agujero, jruuuuuu, y el cuento reaparece
en mitad del cuento. Esta es la segunda ventaja, y la más grande:
que desde aquí se puede cambiar el rumbo."


Por una razón caprichosa de la elección humana, mi nombre es Irene Adler. Si hubo, hay o habrá otra(s) Irene(s) Adler es una cuestión que dejaremos decidir a los filósofos, a los psicólogos o, incluso, a los críticos literarios. Quiero dejar claro que me objetivaré cuando quiera. En dicha situación es posible que alguien se pregunte quién es Irene Adler. Es decir, si Irene Adler es el objeto del que se habla, ¿quién será el sujeto que habla? Creo que lo más parecido a la verdad que puedo responder es que será Irene Adler Perspectiva F.

Y hasta aquí la frialdad, que acabamos de salir de un maldito agujero. ¿Qué cojones...?

3 comentarios:

Muteado dijo...

sin duda el frío te está destrozando el cerebro

godfrey dijo...

oh my dear come back soon please
we miss youlots

v dijo...

lo único que no me convence es la cita ¿de lucía y el sexo?... mmm esa najwa nimri susurrante... hace tiempo que también con ella comencé a sentir cansino desengaño.

por lo demás. adoro a irene adler y su manera de ser varias personas en una.